Este ácaro(Polyphagotarsonemus latus), casi imperceptible a simple vista, es capaz de causar daños significativos en los cultivos, afectando tanto la calidad como la productividad. Con un tamaño de apenas 0,2 milímetros, la araña blanca es difícil de detectar, pero sus efectos son imposibles de ignorar. A continuación, exploramos su origen, características, síntomas en las plantas y los métodos de control más efectivos.
Origen y Características
La araña blanca, también conocida como ácaro blanco o ácaro de las maravillas, es una plaga de origen tropical que se ha adaptado a una amplia variedad de climas y cultivos. Aunque su presencia se ha documentado en regiones cálidas de todo el mundo, su expansión a zonas como Almería está vinculada al comercio internacional de plantas y material vegetal. Este ácaro prefiere condiciones de alta humedad y temperaturas cálidas, lo que explica su proliferación en los invernaderos de la región.
Físicamente, la araña blanca es casi microscópica, con un cuerpo ovalado y translúcido que dificulta su detección. A diferencia de otros ácaros, no teje telarañas, lo que la hace aún más esquiva. Sin embargo, su pequeño tamaño no le impide ser una plaga voraz y polífaga, capaz de afectar a una amplia gama de cultivos, incluyendo pimiento, tomate, berenjena y judía.
Síntomas en las Plantas
Los daños causados por la araña blanca son el resultado de su alimentación en los tejidos vegetales. Este ácaro se instala principalmente en los brotes jóvenes, flores y frutos, donde clava sus estiletes para succionar la savia. Los síntomas más comunes incluyen:
- Deformaciones en hojas y brotes: Las hojas afectadas se curvan hacia abajo, adquiriendo una forma característica de «cuchara». Los brotes jóvenes pueden detener su crecimiento y presentar un aspecto arrugado.
- Decoloraciones y necrosis: En las hojas aparecen manchas amarillas o bronceadas, que pueden evolucionar a necrosis si la infestación no se controla.
- Daños en frutos: En cultivos como el pimiento y el tomate, los frutos pueden presentar deformaciones, grietas y un aspecto rugoso, lo que reduce su valor comercial.
- Caída de flores: La araña blanca también afecta a las flores, provocando su caída prematura y reduciendo la producción de frutos.
Estos síntomas no solo afectan la apariencia de las plantas, sino que también comprometen su capacidad fotosintética y, en consecuencia, su productividad.
Métodos de Erradicación: Control Biológico y Químico
La araña blanca es una plaga difícil de controlar debido a su pequeño tamaño, su rápida reproducción y su capacidad para esconderse en los tejidos más tiernos de la planta. Sin embargo, en Almería, donde el manejo integrado de plagas es una práctica habitual, se han desarrollado estrategias efectivas para combatirla.
Control Biológico
El control biológico es una de las herramientas más utilizadas en la lucha contra la araña blanca. Algunos de los enemigos naturales más efectivos incluyen:
- Ácaros depredadores: Especies como Amblyseius swirskii y Neoseiulus californicus han demostrado ser eficaces para reducir las poblaciones de araña blanca. Estos depredadores se alimentan tanto de huevos como de adultos, lo que los convierte en aliados valiosos.
- Hongos entomopatógenos: Hongos como Beauveria bassiana pueden infectar y matar a la araña blanca, especialmente en condiciones de alta humedad.

